La estructuración del Fondo Jefatura Política, cronológicamente es continuidad del de Subdelegación que concluimos con la Consumación de la Independencia en 1821 y a partir de entonces, desde comienzos del México independiente, iniciamos este nuevo fondo, pese a que la denominación de Jefe Político no se daba aún, pues éste todavía se ostentaba como subdelegado, hasta que la Constitución Política del Estado Libre de Guanajuato del del 14 de abril de 1826 lo llama Jefe de Policía, término que con los años resultaría sinónimo del de Político, ya que en dicha legislación, en su artículo 139, establece “para el gobierno económico-político de los departamentos habrá en todas las cabeceras de ellos jefes de policía…” que serán nombrados por el Poder Ejecutivo del Estado y aprobados por el Congreso. Así mismo, en su artículo 142 expresa: “ejercerán las veces de jefes de policía los alcaldes primeros de las cabeceras en sus respectivos partidos…” e igualmente en el decreto número 35 del 2 de mayo de 1826 se mencionan las atribuciones de los jefes de la policía de los departamentos, cuyas funciones pueden considerarse de índole política.
En León, don Agustín Franco fue el Primer Jefe de la Policía en el año de 1827.
La continuidad de la Jefatura Política se interrumpió con la ley del 23 de octubre de 1835 que fraccionó en Departamentos el territorio de la República, para cuyos gobiernos dispuso el establecimiento de gobernadores nombrados y sujetos al Ejecutivo de la Nación.
Igualmente desapareció la Jefatura Política en virtud de la ocupación de León por los franceses, del 13 de diciembre de 1863 al 26 de diciembre de 1866. Durante ese periodo de intervención se estableció la figura de la Prefectura Política.
Debido al periodo cronológico que esta jurisdicción tuvo a nivel nacional nos arroja una gran cantidad de expedientes por lo que los catálogos y por consiguiente los expedientes que conforman el Fondo Jefatura Política (JP), se fraccionan por décadas, esto con motivo de dotar al investigador una mejor claridad de los asuntos tratados y una mejor organización y por consiguiente el préstamo eficiente.